México tiene una población de 130 millones de habitantes, lo que lo convierte en el país hispanohablante más poblado del mundo. Puede que forme parte de América del Norte (limita con Arizona, California, Nuevo México y Texas), pero tiene su propia identidad latinoamericana y una historia rica y fascinante.

Con 34 lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, México ofrece un sinfín de oportunidades para explorar sus civilizaciones prehispánicas y sus monumentos arqueológicos, como Chichén Itzá (una de las nuevas Siete Maravillas del Mundo), los templos mayas de Palenque y las pirámides de Teotihuacán. Gran parte de la arquitectura colonial, vestigio de los 300 años de dominio español, se ha conservado perfectamente y el país está repleto de museos y galerías que documentan su dinamismo cultural y su energía creativa.

1. Instituto Tecnológico de Monterrey

Fundado en 1943 por un grupo de empresarios locales, el Instituto Tecnológico de Monterrey es una de las mayores universidades privadas, no sectarias y mixtas de América Latina, con más de 90.000 estudiantes de bachillerato, grado y postgrado.

Con sede en Monterrey, el instituto cuenta con 31 campus en 25 ciudades mexicanas. Conocida por ser la primera universidad de América Latina y del mundo hispanohablante en conectarse a Internet, también cuenta con una de las escuelas de negocios de posgrado más prestigiosas de la región y es líder en solicitud de patentes entre las universidades mexicanas.

En la Biblioteca Cervantina se conserva una de las mayores colecciones de incunables del Quijote (primeros libros impresos), junto con una edición original de L’Encyclopédie y el Archivo Mario Pani.

Entre los ex alumnos más destacados se encuentran el ex presidente de México, Enrique Peña Nieto, y muchos miembros de la comunidad empresarial latinoamericana.

1. Universidad Autónoma Metropolitana

Fundada en 1974 con la ayuda del entonces presidente Luis Echeverría Álvarez, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) está repartida en cuatro campus alrededor de Ciudad de México: Azcapotzalco, Cuajimalpa, Iztapalapa y Xochimilco. El quinto tiene su sede en Lerma, una ciudad a las afueras de la capital del país.

Nada más abrirse, la UAM comenzó a ofrecer la licenciatura en ingeniería ambiental, convirtiéndose en la primera universidad mexicana en hacerlo. Ofrece 75 programas de grado y 75 de postgrado.

La UAM está involucrada en una amplia gama de proyectos de emprendimiento social, con el objetivo de apoyar y resolver los problemas de los más vulnerables de la sociedad mexicana. Entre ellos destacan las clínicas de estomatología, los servicios jurídicos para quienes no pueden pagarlos y un centro de investigación y formación en Chiapas.

2. Universidad Nacional Del Valle México

La Universidad Nacional del Valle de México (UNAM), que data de 1551, es la más antigua y grande de América Latina. Tiene varios campus en Ciudad de México y en otras localidades del país, así como cuatro campus extranjeros en San Antonio, Chicago y Hull (Canadá). Los pagos se pueden hace desde casa con uvm pago en linea o llamando al local.

Genera varias publicaciones de investigación y patentes sólidas en diversos temas, como la interacción persona-ordenador y la robótica. También alberga varios centros de investigación excelentes, como el Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico, que se centra en la integración de la ciencia con los problemas del mundo real.

El campus principal de la UNAM fue diseñado por algunos de los mejores arquitectos de México y ahora es Patrimonio de la Humanidad. También cuenta con murales de algunos de los artistas más famosos de México, como Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros.

3. Instituto Tecnológico de Monterrey

El Instituto Tecnológico de Monterrey es un sistema universitario laico privado con 26 campus en todo el país, así como 18 oficinas en todo el mundo. Fue fundado en 1943 por empresarios locales para educar y producir individuos altamente calificados para las florecientes corporaciones de Monterrey de la época. Hoy en día, educa a estudiantes locales e internacionales en Ingeniería, Medicina, Administración y Ciencias Sociales, Artísticas y Humanas, y con los valores de emprendimiento, eficiencia y responsabilidad.

La internacionalización siempre ha sido una prioridad en esta universidad de primer nivel en México y fue la primera institución académica extranjera en ser acreditada por la SACS o Southern Association of Colleges and Schools, una agencia de acreditación altamente reconocida por los Estados Unidos.

En 2020, muchas empresas tuvieron que cambiar al trabajo remoto, pero no todas pudieron cambiar rápidamente al nuevo régimen. Monitorear y administrar a los empleados de forma remota causó muchas dificultades a los gerentes. En este artículo de Colegio Público te contamos cómo organizar procesos, controlar la ejecución de tareas y comunicarte con el departamento.

Piense en las reglas para el equipo remoto

Defina usted mismo cómo ve la jornada laboral de su departamento. Elabora un horario y una guía de trabajo aproximados. Prepare instrucciones claras para todos los empleados. Si es necesario, puede grabar un video para mostrar las funciones de programas y aplicaciones en las que se llevará a cabo la comunicación e interacción de los trabajadores.

Flexibiliza tu horario

Algunos empleados son más productivos a las 8 a.m., mientras que a otros les resulta más fácil comenzar a trabajar más cerca de la hora del almuerzo. Deje que los profesionales elijan su propio horario para que puedan trabajar en un ambiente cómodo. También puede acordar por separado el momento en que todos deben estar en contacto para resolver problemas comerciales.

Establecer una relación de confianza

Una relación abierta y de confianza permitirá a los miembros del equipo trabajar de forma cómoda y eficaz. Empiece por usted mismo. Envíe fotos de su oficina en casa, comparta noticias, inicie conversaciones sobre temas abstractos.

Comienza a aprender

Muchos gerentes comienzan a controlar cada paso de los trabajadores, lo que conduce a relaciones dañadas y una renuencia a completar las tareas de manera eficiente. No debe realizar un seguimiento de cada hora trabajada por un empleado, sino concentrarse en el resultado. Ha contratado profesionales que pueden manejar el trabajo y priorizarse a sí mismos, no pasantes sin experiencia o comprensión.

Comunicarse en mensajería instantánea, correo y videollamadas

Utilice todos los servicios de comunicación en los flujos de trabajo. Por ejemplo, si necesita comprender un problema complejo, es mejor llamar por enlace de video. El correo es adecuado para coordinar tareas. Es mejor escribir sobre pequeñas preguntas y noticias en los chats. Acuerde con los empleados dónde y qué les notificará.

Realizar videoconferencias

La comunicación remota se minimiza, existe un alto riesgo de malentendidos y subestimaciones. Realice videoconferencias conjuntas, discuta estados de trabajo, haga preguntas y, al mismo tiempo, mantenga el espíritu de equipo.

Escribe mensajes con emoticonos

Parece que los emoticonos no tienen cabida en la correspondencia comercial, pero no es así. Es muy difícil adivinar con qué emociones el empleado le escribió una carta o mensaje. Los emoticonos y las pegatinas les ayudarán a entenderse mejor y a entablar buenas relaciones.

Una de las cosas más simples que podemos hacer para ayudar a preparar a nuestros hijos para la escuela es darles muchas oportunidades para desarrollar sus habilidades motoras finas. Un niño con poca motricidad fina o con músculos débiles en los dedos y las manos tendrá muchas dificultades a la hora de aprender a escribir.

En el blog de esta semana, comparto 8 actividades de motricidad fina realmente sencillas que puedes preparar para tu hijo pequeño o preescolar. Estas actividades se centran en el fortalecimiento de los pequeños músculos de los dedos y las manos.

¿Qué es la motricidad fina?

Cuando utilizamos la motricidad fina, estamos usando los pequeños músculos de las manos y los dedos. Esta motricidad fina nos permite utilizar eficazmente las tijeras, sujetar correctamente un lápiz y manipular objetos como botones y cremalleras, abrir fiambreras y construir con objetos como fichas magnéticas o LEGO, e incluso hacer rompecabezas o comer alimentos pequeños con los dedos, como guisantes y pasas.

Hay muchas maneras de fortalecer los músculos de los dedos y las manos en nuestras experiencias cotidianas, pero hoy me gustaría compartir algunas invitaciones sencillas que puedes preparar para desarrollar estas habilidades de forma lúdica.

Enhebrar pajitas

Un simple objeto doméstico puede servir para muchas actividades de actividades de motricidad fina. Corta algunas pajitas en tramos más cortos e invita a tu pequeño aprendiz a enhebrarlas en un viejo cordón de zapato.

Un niño mayor podría crear sencillos patrones AB utilizando pajitas de diferentes colores y practicar el conteo mientras desliza las cuentas de la paja en el cordón.

Canicas en tees de golf

Coge unos tees de golf de la tienda de dólar y una bolsa de canicas. Usamos una bola de plastilina para la base y luego Lilly (de 3 años) colocó cuidadosamente los tees en la masa y luego equilibró las canicas en la parte superior.

Al principio resultó bastante complicado. Una vez que se dio cuenta de que los tees debían colocarse en la masa de forma recta, fue capaz de manipular las canicas para equilibrarlas en la parte superior sin que se cayeran.

Criaturas de plastilina

Nos encanta utilizar la plastilina para trabajar la motricidad fina. Es increíble por sí sola, pero nos encanta añadir algunas piezas sueltas o accesorios para ampliar la invitación. Coge mi receta de plastilina sin cocción aquí.

Estas pequeñas piezas de masa se pueden encontrar en Amazon*, Kmart y Officeworks y son una adición maravillosa a nuestro juego de plastilina. No sólo animan a nuestros pequeños alumnos a manipular la plastilina y las piezas para hacer pequeñas criaturas, sino que también son muy divertidas para el juego imaginativo.